Este pasado 5 de agosto por primera vez, en el estado, dos helicópteros de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado (FSPE), participaron en un traslado de órganos, ante una carrera de contra el tiempo y la posibilidad de salvar más vidas, gracias a voluntaria decisión de un menor en circunstancias irremediables.

“Ya estábamos en riesgo de no concretar esta donación, pero gracias al apoyo de la Secretaría de Seguridad y Paz, lo logramos”, expresó la directora del CENATRA, Rosa Erro Aboytia, quien además practicó personalmente el trasplante de hígado.

Este suceso no sería posible sin la decisión de la familia del donador, una persona menor, originaria de la comunidad de Tierra Prieta, en el municipio de Doctor Mora, a quien se le diagnosticó muerte cerebral, en el Hospital General Dolores Hidalgo C.I.N.; en el cual, personal médico, operativo y familiares formaron un pasillo de honor para despedir al donador entre aplausos y respeto.

“Mis papás estaban seguros de que querían donar… no lo vamos a tener a él, pero vamos a tener su vida en otras personas”, compartió Brenda, hermana del donador.

Con los protocolos activados, se inició una carrera contra el tiempo. El corazón fue trasladado a Monterrey, donde se trasplantó a un paciente en urgencia nacional. El hígado voló a la Ciudad de México, al Hospital Infantil Federico Gómez, donde fue trasplantado exitosamente a un paciente pediátrico. Los riñones se quedaron en Guanajuato y las córneas permitirán que más personas recuperen la vista. Siete vidas fueron beneficiadas.

El traslado aéreo fue esencial. Una de las aeronaves fue piloteada por el capitán Cristian Guerra Pérez, quien señaló que el vuelo tomó una hora con quince minutos, frente a más de cinco horas por tierra, el trabajo fue en conjunto con la Secretaría de Salud de Guanajuato y el Centro de Nacional de Trasplantes (CENATRA).

Escrito por: Brian Sánchez

Fotos: Especiales